Más Madrid propone la incorporación de nutricionistas en la Atención Primaria

  • En la Comunidad de Madrid uno de cada tres niños sufre de sobrepeso u obesidad, una realidad que aumenta cuanto más desciende la renta.

El diputado de Más Madrid, Jorge Moruno, ha registrado una Proposición No de Ley en la Asamblea en la que se insta al Gobierno regional a incorporar la figura del dietista nutricionista en la Atención Primaria con la finalidad de llegar a un profesional por cada 25.000 tarjetas sanitarias, el equivalente a una Zona Básica de salud. “Las instituciones tienen la obligación de velar por la salud pública y garantizar un entorno no obesogénico, esto es, un entorno que no esté plagado de estímulos que incitan al consumo de productos que provocan obesidad”, explica Moruno.

Tal y como se recoge en la exposición de motivos, España es el segundo país de Europa donde más crece la obesidad, algo que dispara las enfermedades derivadas como las cardiuvasculares, tumores o diabetes. Además, según la revista The Lancet, la mala alimentación mata más que el tabaco y en palabras de la Organización Mundial de la Salud, “la obesidad infantil es uno de los problemas de salud pública más graves del siglo XXI”. Y, en lo que respecta a la Comunidad de Madrid, según datos de la Consejería de Sanidad, uno de cada tres niños sufre de sobrepeso u obesidad, una realidad que aumenta cuanto más desciende la renta.

Además, a pesar de que desde el año 2003 la ley considera al dietista-nutricionista como un profesional sanitario, España es el único país de la Unión Europea que no cuenta con la presencia de dietistas-nutricionistas en su sistema sanitario. La efectividad del tratamiento dietético-nutricional aumenta cuando es llevado a cabo por un profesional sanitario experto en consejo dietético, logrando mejores objetivos clínicos, calidad y esperanza de vida.

El texto de la PNL también establece que es necesaria una estrategia integral que abarque el conjunto de realidades: desincentivar fiscalmente la alimentación no saludable e incentivar fiscalmente los locales y la alimentación saludable, promover la compra pública de alimentos de proximidad para proveer a hospitales y colegios, regular el contenido de las máquinas de vending en hospitales y centros de trabajo, incorporar la prescripción médica de la actividad física, reformular los criterios publicitarios destinados al público infantil, o diseñar una zonificación de locales que evite que en la ciudad de Madrid el 95% de los escolares tengan establecimientos de comida no saludable cerca de los centros educativos, son algunas de las líneas de intervención y regulación en materia de alimentación saludable.

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